Tengo una huerta muy chula en Tarazona. A ella vino el otro día mi amigo de Borja Yöel, para conocerla y jugar allí.
Ese día cogimos alcachofas y espárragos. También plantamos varios árboles cerca de donde me voy a hacer una caseta de madera y una balsa para peces. Uno de estos árboles era un ginkgo, que es un árbol de la era de la Prehistoria... y por eso papá lo ha conseguido para mí.
Con las alcachofas nos hicimos unas hondas y jugamos con ellas. También corrimos y jugamos al fútbol pese a que llovía y nos mojamos toda la ropa y las botas. Y a la luz de las velas, dentro de la caseta que tenemos, y ya con ropa seca, jugamos al parchís.
Y es que tener la huerta me hace mucha ilusión porque ahí puedo tener lo que quiera, que son las cosas que me gustan como esa caseta que os digo y su balsa.
Qué bien os lo habéis pasado.
ResponderEliminarUn huerto muy chulo.
Ya nos enseñarás la caseta.
Un abrazo.
Roberto, el papá de Yöel.